Martes

 Buscamos empezar las cosas los lunes sabiendo que, es el día en que menos cosas deseamos hacer, lo sentimos como una carga pesada que, aunque avance el día, nosotros no avanzamos emocionalmente porque los lunes creo que son los días menos  emocionantes, y porque nos tendemos a bloquear; el día pasa aunque nos rehusamos a seguirle el paso y deseamos que acabe, como que si al acabar, lo que nos agobia desaparecerá.

Ya que el lunes nos trae determinados sentimientos,  creo que lo que necesitamos es cambiar el chip, o mejor dicho, el lado A al lado B ( del caset), y hacer las cosas el martes , porqué no, cada martes algo nuevo;  fresco, divertido,  animado,  creativo;algo extraordinario,  y así los lunes estarán casi que pegados (con pegamento) con los domingos,  pongamolos como un día de corrido, así no sentiríamos lo agobiante de pensar en el lunes,  que al fin de cuentas,  es sólo un día y nosotros tenemos el control. 

Sería posible que tuviéramos las misma mentalidad del fin de semana todos los lunes y  poder empezar también así el martes? Podríamos jugar con la creatividad esos días y el martes sacarla a brillar; no, no es un paseo en cochecito, es simplemente ver que los martes son, a mi parecer, el día  en que más ganas le podríamos meter a los proyectos. ¿Porqué? Pues, porque ya estamos frescos, renovados y listos para alzar el vuelo. Es el momento donde nuevas ideas pueden surgir,  aunque, el tal refrán  que tienen los martes no me causa  nada chiste, y si es un chiste,  definitivamente no gracia tiene.

El martes, aunque su nombre suene tosco es, sin duda, el día preciso para las cosas nuevas; un proyecto,  una o más ideas, es un día con energías, que si no las tenemos puestas, te las pone enseguida. Todos los días son inciertos aunque unos tengan más peso que otros, porque se le ha dado más importancia al jueves que está cerca del viernes,  que al marte que es, por decirlo así, el día de las oportunidades,  el de las cosas nuevas después del fin de semana "pegado".

El martes debería de ser considerado el día de los nuevos comienzos, de energía pura ya que nos hemos recargado el fin de semana. ¿ Qué hay de malo en querer más el martes que al lunes, pero jamás más que al viernes? 

¿Porqué el martes? Porque el lunes es muy predecible y el viernes muy ansiado; el miércoles es mitad de semana, y el jueves es santo; el sábado y el domingo  prácticamente son sagrados; entonces nos queda el martes para crear lo que queramos.