Momentos para apreciar

 Tener la dicha, la fortuna de vivir en un lugar rico en biodiversidad, es un regalo; poder gozar de un ecosistema rico en  especies y verlas andar con toda libertad,  como debe ser; es un espectáculo.

Siempre me he inclinado por la naturaleza  más que por las lindas fachadas de ciudad, pues ahí, en esa libertad,  las tensiones desaparecen y dan paso a la creación, a la imaginación, al encuentro con la madre naturaleza para entablar conversaciones con los más sabios; para apreciar los detalles que nos da la vida, para vivir intensamente  minutos de placer. 

La mayor parte de mi vida la he vivido así, rodeada de árboles,  diferentes especies de animales,  de plantas y siempre con un merecido respeto. Los paisajes (soy una "paisajista" por naturaleza) me hacen pensar qué, en efecto,  es como un océano. Puede ser un pequeño mar con sus cambio de  incertidumbre, sus distintas tonalidades,  sus olas y sus oleajes. Aquí desaparecen los ruidos, el zumbido constante,  las dudas, las preguntas, los miedos, las  inseguridades. 

Ver el horizonte que podría pensar que es incierto, que trae incertidumbre,  pero es acaso tan "mala" la incertidumbre? No, de hecho debería,o es una oportunidad para dar giro, para fortalecerse, para crear; es un espacio para soltar lo que no queremos cargar.

Qué rico es poder ver los paisajes, el horizonte,  el campo abierto, el hábitat natural de todos, incluyéndome como ser vivo que soy, que aunque no duerma en los árboles,  ni coma de manera instintiva como lo hace una iguana o cualquier animal; pertenezco, soy parte del ecosistema ( terrestre en éste caso), y como parte de el , también hago mi labor; respetar, proteger y nutrir de cierta manera el regalo que se me ha dado, porque poder disfrutar de todo ésto; es un regalo que no cualquiera agradece y esto es calma, es paz y para mi: la vida.

Tengo una colección infinita en la memoria,  más que coleccionar objetos, que no lo hago (talvez libros); colecciono momentos,  experiencias, vistas al cielo, al horizonte,  a lo infinito; colecciono en pocas palabras,  placeres- cotidianos  talvez sin darme cuenta,  porque esto que escribo trato de hacerlo casi a diario,  porque una cita con la naturaleza no me la pierdo, pues me llena de energía y me recarga de energía,  y todo en conjunto es vida; la vida que quiero seguir viviendo.