¿Soltar o transformar? Depende de lo que se desee o de la situación. Soltamos cuando definitivamente no tenemos otra alternativa,cuando es necesario cortar toda conexión, cuando sentimos necesidad de liberación; y no es malo, al contrario, es lo más sano y sumamente necesario para nuestro crecimiento para nuestra evolución interna, talvez.
Tendemos a tener miedo con el hecho de pensar en soltar, creyendo que lo que dejamos ir nos dejará un vacío de por vida; en ese momento no estamos conscientes del gran peso que estamos dejando ir, pero al pasar el tiempo, damos las gracias porque hemos dejado atrás lo que no nos permitía avanzar.
Por otro lado, el transformar es poder buscar otra opción, otra solución a algo que deseamos cambiar de manera positiva. En nuestros pensamientos radica dicha acción; al transformar nuesestros pensamientos estamos dando paso a nuevas alternativas, tener una visión más clara de de lo que se quiere. Transformar también forma parte de las situaciones que podemos llegar a vivir; aquí es importante evaluar las cosas que realmente merecen ser transformadas.
Transformar es recrear, es darle un toque único a las cosas, a las situaciones, a los pensamientos, es como voltear la página y hacer algo nuevo con toques frescos, es sobre todo, crecer. Transformar desde el interior para florecer en el exterior.
Tener el valor de soltar y transformar como lo hace el cielo, cuando nos muestra sus destellos de colores al finalizar el día. Suelta como cuando se tira polvo al viento y transforma con colores, sombras y luz un espectáculo que podemos apreciar si nos tomamos el tiempo.
Soltemos lo que no va con nosotros para poder agarrar lo que sí, transformemos desde el interior, conscientes del cambio que esto puede traer, un cambio que es necesario para nuestra evolución.
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